

Vamos, que el humor es una llave maestra para adaptarse. Y está demostrado que, quien no se adapta, muere. O sea, que el humor, además de risa… ¡da mucha vida!

Este taller de Risilencia no va de aprender a contar chistes ni de salir en el Club de la Comedia; Va de aprender a vivir mejor entrenando el humor en tu cotidianidad.

Nos hace mucha falta porque… ¡Nos reímos 10 veces menos que cuando éramos niños! (Ese datos sí que NO da risa…)





